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AQUÍ NO CABE UN MEMORÁNDUM
DEL RAVAL: NO SE CONSTRUIRÁ AQUÍ EL MUSEO QUE CUSTODIE LOS
VALORES, LOS GESTOS, LA MEMORIA DE SUS HABITANTES. NO HABRÍA RAZÓN:
NO HA EXISTIDO GUERRA ALGUNA, LOS ENEMIGOS NO HAN ARRASADO NUESTRAS CASAS,
NO HAN VIOLADO A NUESTRAS MUJERES; NINGÚN TERREMOTO, NINGÚN
CICLÓN, NINGUNA CATÁSTROFE, SE HA LLEVADO CONSIGO A NUESTRAS
FAMILIAS, NI HA BORRADO TAMPOCO LAS CONSTRUCCIONES QUE, COMO HUELLAS, HABÍAMOS
DEPOSITADO SOBRE EL TERRITORIO, DOMEÑÁNDOLO. NADA QUE RECORDAR,
PUES, NINGÚN ANIVERSARIO QUE CONMEMORAR O DERROTA QUE CELEBRAR.
LOOS DICE, HABLANDO DE LA
CASA: SÓLO HAY UNA PEQUEÑA PARTE DE LA ARQUITECTURA QUE PERTENEZCA
AL ARTE: EL MONUMENTO FUNERARIO Y EL MONUMENTO CONMEMORATIVO. TODO LO DEMÁS,
LO QUE SIRVE PARA UN FÍN, DEBE QUEDAR EXCLUÍDO DEL REINO
DEL ARTE.
EL XINO NUNCA HA EXISTIDO.
EL RAWAL NO GUARDA LA TUMBA DE NINGÚN MUERTO: EL XINO NO TIENE AQUÍ
MONUMENTO FUNERARIO ALGUNO.
O BIEN, EL RAWAL NO ES OTRA
COSA QUE EL XINO, QUE EL ARRABAL (CORDONERÍAS, MEUBLÈS, METALISTERÍAS,
BARRAS AMERICANAS, CASAS-TALLER, ZONA MARGINAL DE DIFÍCIL ACCESIBILIDAD
(sic), ETC.). EL RAWAL EXHIBE SU DESAPARICIÓN EN LOS ESCAPARATES
CERRADOS, LAS PERSIANAS BAJADAS; SU RUINA EN LOS ARRIOSTRAMIENTOS DE EDIFICIOS
YA DERRUIDOS, PERMITIENDO A LOS VECINOS PERSEVERAR (¿NO SE HAN DADO
CUENTA? AL RAWAL NO SE LE PUEDEN EXTIRPAR LOS ÓRGANOS: NADA DE EDIFICIOS
DE VIVIENDA CLASIFICADOS, MONUMENTALIZADOS, O LA MANZANA ENTERA O NO HAY
MANZANA, HASTA TAL PUNTO UNAS CASAS SE APOYAN EN LAS OTRAS TEJIENDO UNA
URDIMBRE, INTEGRANDO ELORGANISMO).
(EL XINO Y EL RAWAL SON
LA MISMA COSA: EL RAWAL VIVE EN EL XINO; O CUANDO MENOS, HA VIVIDO).
OTRA LECTURA MÁS DEL
MISMO TEXTO: TODO LO QUE ESTÁ VIVO ESTÁ EXCLUÍDO DEL
REINO DEL ARTE; TODO LO QUE ESTÁ MUERTO SE MONUMENTALIZA, SE HACE
TUMBA.
TODO LO QUE ESTÁ
VIVO SIRVE PARA UN FÍN: LA PRODUCCIÓN NO SE REALIZA Y VERIFICA
SINO EN SU OPUESTO, EN EL CONSUMO, USO Y DESGASTE DE LO PRODUCIDO (UN VESTIDO,
POR EJEMPLO, NO SE CONVIERTE EN VESTIDO REAL SINO EN EL ACTO DE LLEVARLO).
UNA CASA NO ES REAL SINO CUANDO SE HABITA, SU VIDA NO TIENE OTRO LUGAR
QUE EL DEL HABITANTE QUE LA USA. UN PASO MÁS: LA CASA NO SE REALIZA
FUERA DE SU HABITANTE.
LA VIVIENDA DE NUESTRO TIEMPO
AÚN NO EXISTE; SIN EMBARGO, LA TRANSFORMACIÓN DEL MODO DE
VIDA EXIGE SU REALIZACIÓN. (...) ENTONCES LA CASA, DESAPARECIDA
COMO INSTITUCIÓN, COMO LUGAR ESPECÍFICO OPUESTO A LOS OTROS
LUGARES -POR CUANTO EL OCIO DEJARÁ DE SER LA APARENTE OPOSICIÓN
AL TRABAJO, Y LO PRIVADO DEJARÁ DE SER LA APRENTE OPOSICIÓN
A LO COLECTIVO- ESTARÁ POR TODAS PARTES: SERÁ CUALQUIER LUGAR,
CADA ESPACIO Y CADA TIEMPO DONDE SE AFIRME Y REENCUENTRE UN SUJETO LIBRE
Y MÚLTIPLE, IGUALITARIO Y REAL.
EL HABITANTE ES ESE SUJETO
LIBRE Y MÚLTIPLE, IGUALITARIO Y REAL QUE CONSTRUYE SU CASA DEL MISMO
MODO COMO UTILIZA LAS BASES DE DATOS DE SU DESPACHO, ARREGLA LAS TUBERÍAS
DE SUS CLIENTES, DISTRIBUYE PIZZAS O NAVEGA POR INTERNET. EL HABITANTE
NO ALQUILA LA VIVIENDA DE OTRO TIEMPO (¿QUÉ CASA SERÍA
AQUELLA?), SINO EL VOLUMEN HABITABLE QUE NECESITARÍA PARA CONSTRUIR
BARCAS, PARA CARDAR RAFIA, O PARA COLOCAR UN MÓDEM (LOS ARRABALES
SIEMPRE SON DENSOS: SE AMONTONAN ALLÍ LOS ARTESANOS RENEGADOS DE
SU GREMIO).